REPRESION HOY Y SIEMPRE

Hablar de represión en la actualidad haciendo distinciones políticas es arrancar mal de entrada, esquivar el bulto. No hay gobierno q no reprima, la represión es su consecuencia lógica para existir. De modo tal que para aproximarnos al tema hay q dejar de lado los fanatismos, hacer el ejercicio, en la medida de lo posible, de abstraerse de la realidad para poder observar con mayor precisión todo el problema.

Ellos instauran el miedo, y nosotros buscamos seguridad. Seguridad económica, laboral o material y así es como manejan nuestras voluntades a su antojo y conveniencia. El miedo a perder esto o aquello es el pan de cada día que este sistema otorga a los/as laburantes. Todo esto desde luego constituye una de las tantas formas de represión. Lo es también la droga, el futbol, el juego, la tv, y demás factores alienantes que se han creado con el único fin de mantenernos inactivos ante las atrocidades que hoy ocurren pero en que en otras épocas, como la de los mártires de chicago por ejemplo, no hubiesen ocurrido o x lo menos no se la hubiesen llevado de arriba como ahora.

Sabemos bien como el sistema se apresura a apuntalar sus métodos para que en nosotros se nos hagan habito y ni cuenta nos demos de cuan dominados vivimos.

Lo que uno ve permanentemente es que la clase dominante se nos ríe en la cara, xq sabe y hasta se jacta de su victoria. Sabe perfectamente que nada podrá salirse de la órbita de control que ellos crearon. Con sus vicios y costumbres van generando seres antisociales y cuando esto no funciona, llega la brutalidad, las detenciones arbitrarias, las torturas en cárceles y comisarías, el ninguneo a las víctimas y en algunos casos hasta la desaparición. Practica que muchos endilgan a la dictadura pero que nunca dejo de realizarse en Argentina.

Es más que obvio que ante este panorama las posibilidades de enfrentar al sistema, combatirlo y construir nuevas formas de relación se hace sumamente difícil. Todo está dado para desmoralizarnos y así perpetuar la resignación imperante.

Pero es bien sabido también que donde hay opresión hay resistencia, apostemos a eso, no nos dejemos doblegar por el miedo, no necesitamos a nadie que nos otorgue garantías de ningún tipo, ni derechos, ni libertades. La dignidad que tenemos es inherente a la raza humana y debemos cuidarla siempre. Los políticos, los banqueros, los curas y las patronales harán su juego como siempre, no por nada han reconstruido al Estado, nosotros no empezamos de cero esta lucha, contamos con la experiencia de miles de rebeldes que históricamente se han enfrentado a ellos y nos toca a nosotros recoger el guante de la lucha x la revolución social. De nosotros depende, forjar un mundo nuevo o conformarnos con esta calamidad.